
Hago un repaso mental a las tardes que no pasé contigo, y me descubro a mí mismo vagabundeando, barriendo debajo del sofá, navegando entre las web de música, informática o fotografía, o simplemente tumbado en el sofá pensando en las musarañas.
Hago un repaso mental de los besos que no te di y me encuentro a mí mismo enumerando vasos vacíos, bebiendo del agua limpia, fresca y seca.
Hago un repaso mental de los días que me ví sonreir, y descubro bromas privadas, encuentros sólo imaginados, complicidades que no son más que invenciones mal inventadas. Por eso hoy no quiero hacer repasos mentales, sólo quiero dormir, descansar, mirar hacia adelante y pestañear. Quiero pasar el día (y la noche) pestañeando.
Hago un repaso mental de los besos que no te di y me encuentro a mí mismo enumerando vasos vacíos, bebiendo del agua limpia, fresca y seca.
Hago un repaso mental de los días que me ví sonreir, y descubro bromas privadas, encuentros sólo imaginados, complicidades que no son más que invenciones mal inventadas. Por eso hoy no quiero hacer repasos mentales, sólo quiero dormir, descansar, mirar hacia adelante y pestañear. Quiero pasar el día (y la noche) pestañeando.